A Berlusconi le gustan las orgías

ROMA, Italia.- La prostituta Patrizia D´Addario, quien afirma haber cobrado 2.000 euros por mantener relaciones con el premier italiano Silvio Berlusconi, contó ahora que en una oportunidad se negó a dormir con él porque en la cama había otras damas.

"Las orgías nunca me gustaron, y de aceptar me hubiera encontrado en una situación desagradable", narró D´Addario en un artículo publicado ayer por el diario italiano "La República". El periódico indicó, además, que el primer ministro organizaba fiestas con mujeres de lujo en el palazzo Grazili, en Roma.

Se cree que el empresario Giampaolo Tarantini era el encargado de conseguir las trabajadoras sexuales. De hecho, este hombre está siendo investigado por la fiscalía de Bari por supuesta inducción a la prostitución.

D´Addario declaró que la noche del 15 de octubre del año pasado evitó dormir en la cama de Berlusconi porque había al menos cinco prostitutas, dos de ellas "muy vistosas". Según su relato, el primer ministro le pidió con gestos que se uniese al grupo, pero ella se metió en un baño.

El diario afirma que las declaraciones de D’Addario han sido confirmadas por otra mujer, María Teresa De Nicoló, de 37 años, quien participó en otras fiestas y que dijo que el "ritual" era siempre el mismo.

Para "La República", el comportamiento de Berlusconi contradice los valores familiares que proclama. Los nuevos capítulos sobre este escándalo han sido publicados sólo dos días después de la conclusión de la cumbre del G-8 en la ciudad de L’Aquila.

El pasado 29 de junio, el presidente de Italia, Giorgio Napolitano, reclamo a los periodistas que hasta que concluyera el encuentro de las grandes potencias concedieran una tregua a Berlusconi.