Un día después de haber sufrido un fuerte traspié en el Parlamento, la Presidenta de la Nación salió a dar una fuerte réplica en la que hizo una encendida defensa de Mercedes Marcó del Pont, aseguró que va a pagar la deuda con las reservas, a pesar de lo que el Congreso resuelva y la Justicia diga, y le reclamó a los legisladores de la oposición que le presenten un proyecto alternativo para pagar la deuda, si lo desean.
Y sobre todo, denunció un “intento de destitución” emergente de las decisiones emergentes del Parlamento los últimos días.
En su mensaje, la Presidenta denunció que desde el Congreso “se obstruye permanentemente a través de medidas que son un verdadero un abuso de poder, porque quienes tienen el deber de administrar no son los jueces, sino la Presidenta de la República”.
Al encabezar un acto en la Casa de Gobierno, Cristina Fernández de Kirchner aseguró que “ayer vimos una fotografía del pasado argentino, de los que endeudaron en los años 90 mediante un decreto que aprobó el Plan Brady, 87.000 millones de dólares; mediante un decreto simple se aprobó el megacanje en 2001, también la pesificación asimétrica, más corralito/corralón”.
“Las deudas que esta Presidenta quiere pagar y va a pagar con las reservas del Banco Central, en el marco de lo que dice la Constitución y la propia Carta Orgánica se encuentran depositadas” en el Tesoro, dijo, y en ese marco remató: “Voy a anunciarles que vamos a pagar. No voy a permitir que un juez defaultee la deuda, ya la defaulteó otro presidente y eso ocasionó graves, gravísimos perjuicios a todos los argentinos y al erario público”.
Cristina citó al Código Penal, que le marca que “ningún funcionario puede cometer actos a sabiendas que esos actos le van a salir más caros que otras acciones”.
“Yo se que tenemos recursos disponibles absolutamente de patrimonio de la República Argentina, las reservas las tiene el Banco Central, pero no es el Banco Central de Namibia ni de Holanda, sino de la República Argentina”, remarcó la mandataria, que reiteró que “por esas reservas nos están pagando 0,5% anual; si yo contrajera empréstitos y créditos para pagar la deuda, sería pasible de ser condenada por administración fraudulenta, y no lo voy a ser”.
“Estoy convencida que estoy actuando en el marco de la Constitución nacional y que me imponen las leyes, que es solucionar los problemas que otros le han creado a la Argentina”, declaró la mandataria, que cargó contra la oposición diciendo que “lo que quieren lograr es que no hagamos estas obras del salado, o que recurramos a las medidas de descuentos de salarios como hicieron estas mismas personas en el año 2001”.
Y aclaró: “No lo voy a hacer, estoy dispuesta a enfrentar la condena de cualquier juez circunstancial de la Argentina, lo que no estoy dispuesta es enfrentar la condena de la historia, que significaría condenar a la Argentina otra vez más al endeudamiento, al default, a no pagar”.
A continuación, Cristina Kirchner volvió a cargar de manera durísima contra la Justicia, al denunciar que “esos mismos que no quieren que paguemos y recurren a jueces que pareciera que están alquilados”. Y citó puntualmente el caso de la jueza que resolvió este jueves frenar el pago de la deuda con reservas señalando que “es pareja del juez Marinelli”, un magistrado que también tuvo una resolución en el mismo sentido”.
“Y luego hablan de matrimonios presidenciales, ¡por Dios!”, ironizó.
Defendió su investidura señalando que a ella la votó el 46% de los argentinos, para que durante cuatro años gestione el Estado y lo administre. “Al anterior presidente lo habían votado menos, pero el 22%, son los que tienen la responsabilidad de administrar las finanzas, recursos del Estado, para eso también tenemos una ley de presupuesto”.
“Estamos haciendo las cosas en el marco de la constitución y las leyes”, enfatizó luego, remarcando que “si no están de acuerdo, ¿por qué no presentan un proyecto de ley, que nos expliquen cómo van a pagar la deuda externa con los recursos que hoy están en el Presupuesto?”.
Fue en ese momento que denunció que “estamos ante tiempos de destitución evidente”, y se quejó porque la oposición convocara a la titular del BCRA a que se presentara el miércoles en la Comisión de Acuerdos. Defendió así a “una persona del valor de Mercedes Marcó del Pont, una economista reconocida, con condiciones personales, académicas. ¿Cómo pueden en media hora decidir que no puede ser presidenta del BCRA, cuando todos saben que además la Presidenta tiene la facultad de proponer a quien va a presidir el Banco Central es una facultad del Presidente”.
“He sido senadora, nunca se vio tal avasallamiento de lo que le corresponde a cada sector político… Y pensar que nos trataron a nosotros de autoritarios y hegemónicos –deslizó-. Quiero que todos sepan que durante toda la gestión, siempre se le respetó a la oposición los lugares que le correspondían, e inclusive en el Senado se les reconocían más lugares de los que le correspondían”.
A su juicio, dijo que “no eran las formas lo que les molestaban”, y disparó contra “esta nueva mayoría muy sui generis”, citando a continuación a “los viejos resabios del Partido Socialista de Santa Fe” junto a sectores del reutemismo, mencionó a “quien dirigió durante diez años, los 90, los destinos del país; quien declaró el default”, y concluyó en medio de aplausos encendidos que “eso se llama rejunte político, que sólo quiere obstruir, destruir y que no flexionen las instituciones”.
Remarcó luego la condición presidencialista del sistema argentino y reclamó que “si no están de acuerdo” modifiquen la Constitución, pero advirtió que si fuera este un gobierno parlamentario, algunos dirían que no pague la deuda y la investigue, otros que sí la pague, preguntándose entonces “qué país tendríamos”.
Así las cosas, dijo que “las instituciones no pueden tomar actos de venganza”, como definió lo sucedido con Mercedes Marcó del Pont. “Fue un acto de venganza de la más vieja estofa que recuerde haber visto en la República Argentina”, dijo, asegurando que la titular del BCRA “cumplió con el decreto de necesidad y urgencia porque sabe lo que dice la Constitución”, preguntando luego “por qué se viola lo que establecen los reglamentos del Senado, lo que dice la Constitución”.
Resaltó Cristina que “Argentina es uno de los lugares más seguros para invertir, porque hemos acumulado reservas, porque hemos defendido como nunca nuestro nivel de deuda. Porque producimos lo que el mundo necesita, que son alimentos; todos los números macroeconómicos son buenos”, dijo, para hablar luego de la suba de los bonos los últimos días, contrastándola con lo sucedido el miércoles: “Cada vez que el Gobierno actúa, la economía sube; cada vez que actúa la oposición en el Parlamento con la ayuda de algún juez, la economía baja… Hay que decidir en qué país queremos volver a vivir. Si el país de la incertidumbre, o a la certeza de estos años”.
En ese marco dijo que “no se puede seguir actuando en forma absolutamente irracional; si no están de acuerdo con esta forma de pagar la deuda, que nos digan cómo hacerlo, y si la forma de ellos es mejor, juro que voy a hacerlo, pero quiero que me lo expliquen”.
“Que me expliquen que pagando de la forma que ellos proponen vamos a poder seguir pagando a jubilados, asignación universal, obras de infraestructura; si me explican que puedo seguir pagando todo eso, vamos a hacerlo, somos todo oídos para escuchar las propuestas que tienen para hacer”, prometió.
Insistió a continuación que “las instituciones no pueden tomar actitudes de venganza, contra nadie. Ni aún contra las personas más malas, porque está prohibido contra la Constitución”, remarcando que “está prohibida la venganza” y reivindicó para su sector que “tenemos en el ADN la no venganza”.
Pidió a las instituciones “que funcionen, que lo hagan de acuerdo a las instituciones.
Que después me juzguen. Pero mientras tanto debo seguir pagando la deuda y lo voy a hacer”.
FUENTE: Parlamentario.com