El proyecto de nueva ley de radiodifusión que la presidenta Cristina Kirchner presentó el jueves todavía no llegó al Congreso y ya levantó polvareda.
Sucede que el marco, en su versión actual, no se anda con tibiezas y arremete sin titubear contra negocios solidificados, como es el caso del vínculo que algunos de los principales canales de TV mantienen con productoras de contenidos.
Y también prepara el terreno para la injerencia del Gobierno en cuestiones como el precio bajo el cual hoy se comercializa la televisión por cable.
Otro aspecto resonante que postula la legislación en estudio es la posibilidad de que empresas de servicios públicos como las telefónicas, las cooperativas, o incluso las prestadoras de energía como Edenor, puedan ofrecer televisión.
En el primer caso, la intención de la normativa de incrementar la producción independiente de contenidos locales choca de frente con el modelo impuesto por señales como canal 13, que hoy basa buena parte de su programación en el material desarrollado por productoras como Ideas del Sur y Pol-ka.
En diálogo exclusivo con iProfesional.com, Gustavo López, actual subsecretario general de la Presidencia, ex interventor del Comité Federal de Radiodifusión (Comfer), y considerado uno de los más acérrimos defensores del proyecto, explicó que “en caso de aprobarse, se establecerá una cuota del 60% de contenido nacional, de los cuales un 10% quedará en mano de producciones independientes”.
“Los aportes a los canales tendrán que ser hechos por productoras no ligadas a éstos. Por ejemplo, Canal 13 no podrá contar con contenidos de Pol-ka porque tiene participación en esa empresa. Tendrá que contratar material de otras productoras”, dijo.
En la actualidad, el Grupo Clarín –controlante de canal 13–, posee el 55% de la productora creada por Adrián Suar. El mismo impedimento, en términos de provisión de contenidos, alcanzaría a Ideas del Sur, cuyo 30% también se encuentra en manos del mismo multimedio.
López sostuvo que una de las premisas básicas del proyecto de ley comprende motorizar la creación de material televisivo en el interior del país. De esta forma, lo que se pretenderá es revertir el status de las repetidoras de señales porteñas que, en la actualidad, exhiben la mayoría de los canales provinciales.
“También se contempla una cuota de pantalla para el cine nacional, o lo que se conoce como derecho de antena. Esa pauta es una réplica de lo que se hace en Europa. Y consiste en que, de manera obligatoria, los canales de TV participen en la producción de una determinada cantidad de películas argentinas”, precisó.
Así, permitiría elevar los niveles de inversión para el desarrollo de contenidos audiovisuales. Y, al mismo tiempo, se estarían generando nuevos puestos de trabajo.
“Una vez aprobada, la nueva legislación le otorga a los canales hasta un año para adecuarse a todo esto”, comentó.
Los nuevos actores
Consultado respecto de quienes son los nuevos actores que podrían sumarse al negocio de la radiodifusión, de ser aprobado, el texto que ahora llegará al Congreso, López reafirmó la posibilidad de que las empresas de telefonía tomen participación en dicho mercado.
“El abanico es muy amplio, pero lo cierto es que tanto las telefónicas como las cooperativas, organizaciones no gubernamentales (ONG) y los sindicatos podrán tomar parte de la producción de contenidos”, sostuvo.
Y añadió: “Eso siempre que cumplan con las exigencias. Hoy, por ejemplo, Telefónica por cuestiones vinculadas con la protección de bienes culturales no podría”.
iProfesional.com le consultó si una compañía como Edenor, o su par Edesur, podrían ofrecer televisión. López respondió: “Sí, pero siempre que cumplan con todas las exigencias de la ley”.
Televisión digital
El entrevistado también mencionó el ingreso de la Argentina en el ámbito de la televisión digital como un factor que, apuntalado por la potencial nueva ley, modificará por completo el escenario local de medios.
“El ingreso en la tecnología digital aumentará hasta cuatro la cantidad de frecuencias. Esto permitirá el desarrollo de nuevos canales de TV y se abrirá la transmisión a celulares”, dijo.
¿Se crearán canales específicos para teléfonos móviles? López aseguró que no. “Serán los mismos. Aunque, al aumentarse la cantidad, seguramente surgirán nuevos operadores”.
¿Qué sucede con el negocio de la provisión conjunta de Internet, televisión y telefonía (Triple Play)? “Hoy el Triple Play es legal para los que dan cable. Ahora las telefónicas podrían hacerlo, pero en las condiciones de fin de monopolio”, expresó.
Más allá de esta posibilidad, López dijo que las “telcos” podrán participar del Triple Play, siempre y cuando cedan parte de la red que hoy controlan a otras telefónicas.
Otro dictamen incluido en el proyecto de ley pendiente de aprobación consiste, entonces, en la apertura del mercado de telefonía fija a otros prestadores.
El precio del cable
Durante la charla con este medio, López adelantó cuál será el próximo paso de ser aprobado el proyecto de ley. En este caso, el gran protagonista será el cable y su escala de precios.
“Habrá una tarifa social. Se fijará a través de un decreto del Poder Ejecutivo previa audiencia pública. Se pondrá un abono básico, y las empresas fuera de ese parámetro podrán cobrar lo que crean conveniente. Pero habrá un precio fijo para una cantidad de canales. Un paquete básico para que todos puedan acceder”, detalló.
Según el funcionario, la posibilidad de incrementar la cantidad de canales de aire que ofrece la televisión digital garantizará la llegada de contenidos televisivos a más lugares de la Argentina, además del cable.
“El espectro se dividirá en 33% para los privados, 33% para el sector público y 33% para las organizaciones sociales. O sea, de cada 3 licencias nuevas, una irá destinada para cada sector. La idea es que a través de esa planificación se pueda llegar a sitios donde hoy apenas si funciona un canal de televisión”, concluyó.
FUENTE:
Patricio Eleisegui
iProfesional.com