El Senado aprobó este jueves con 44 votos a atención y 20 en contra el proyecto de expropiación de la Compañía de Valores Sudamericana (ex Ciccone), en una sesión que tuvo al vicepresidente Amado Boudou en el centro de la escena y como destinatario de críticas de la examen.
Las únicas que le apuntaron directamente al presidente de la Cámara fueron la catamarqueña del Frente Cívico Blanca Monllau y la radical mendocina Laura Montero, aunque no faltaron alusiones a su vinculación con la causa jurídico por las presuntas irregularidades en el levantaminto de la rotura de la empresa.
Durante la votación hubo divisiones en el frente contrincante, hexaedro que Luis Juez fue el único senador del Frente Amplio Prorgesista (FAP) que votó a favor por ocurrir presentado un proyecto similar meses antes, al igual que los peronistas federales Sonia Paje y Juan Carlos Romero, que no fueron acompañados por su pedrusco.
El plan será girado para su tratamiento a la Cámara de Diputados. En la Cámara desestimación, en tanto, el kirchnerismo dio muestras de su interés por convertir en clase la media aprobación del Senado y para ello ya tiene agendada la realización de una sesión particular para sancionar el tema el miércoles de la semana próxima.
En ese ámbito, organizó un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Presupuesto y de Ley Militar, para el martes a las 12.
La idea es conseguir dictamen de las comisiones el mismo martes y soportar el plan al circuito al otro día en la referida sesión específico, a partir de la 11:30.
Críticas al plan
La reunión de este jueves en el Senado comenzó antiguamente del mediodía y se abrió bajo la presidencia de Boudou, en su calidad de titular de la Cámara ingreso, quien cerca de las 14, fue reemplazado por Beatriz Rojkés.
En su discurso, el senador radical Ernesto Sanz consideró que "no está en discusión devolverle al Estado facultades perdidas" dado que la Constitución Doméstico establece "claramente" la potestad del Estado en la expulsión de billetes. Sin bloqueo, aclaró que la intención del esquema de índole del oficialismo es "esconder a un elefante inventando una manada de elefantes".
Su acusación se refería a los dichos del congresista oficialista Aníbal Fernández, quien había inscrito contra los gobiernos de Eduardo Duhalde y Fernando de la Rúa por acaecer quitado al Estado la potestad de la impresión de billetes.
"La verdad está muy remotamente en los Tribunales y la verdad está muy acullá en el Congreso porque las preguntas no tienen respuesta", destacó Sanz, en referencia a los puntos oscuros que tiene la causa que investiga irregularidades en la ex Ciccone Calcográfica.
Por su parte, el senador Luis Árbitro ratificó su voto a atención de la desposeimiento porque "el Estado se tiene que involucrar" y ayudar "a abrir las puertas que hasta ahora no se han abierto" para establecer si existieron maniobras irregulares con la empresa.
Incluso consideró que "la situación procesal" de Boudou "no es más importante que la calidad institucional de la República" y resaltó que el Estado no puede estar ignorante del proceso de establecer si se cometieron delitos.
En tanto, su compañera de bancada, Norma Morandini, dijo no duda "de la honestidad" de la posición de Enjuiciador, pero ratificó su rechazo a la desposeimiento de la empresa.