Si se observan las planillas de inscripción de la Universidad Nacional de La Plata para el ciclo lectivo 2010, salta a la vista que las carreras tradicionales continúan acaparando el mayor número de aspirantes. No obstante, si se analizan en el contexto de los últimos diez años, dejan ver una lenta pero progresiva tendencia: el decrecimiento de la matrícula en algunas de las disciplinas consideradas "clásicas" -como Derecho- y, como contrapartida, un aumento en aquellas denominadas "no tradicionales" -Informática y Psicología-, así como en las carreras nuevas y en las cortas.
"Vamos logrando un equilibrio en materia de inscripción", dijo a este medio el secretario general de la casa de altos estudios, Fernando Tauber, tomando como parámetro los números de anotados en 2009 para 2010.
La UNLP ha puesto en marcha una batería de herramientas para lograr reorientar la inscripción, que incluye desde trabajos de promoción hasta becas que favorecen a quienes se inclinan por determinadas disciplinas.
Algunos integrantes de la comunidad universitaria consideran insuficiente ese "reequilibrio" y sostienen que deberían ponerse en práctica políticas más agresivas de reorientación vocacional y otros mecanismos -como los que emplea la propia Universidad en sus colegios- para compensar los desequilibrios que "siguen siendo muy grandes", enfatizan.
Destacan que hay carreras que siguen teniendo más demanda laboral que inscriptos, como es el caso de ciertas ingenierías -incluida ingeniería Forestal- o las carreras que se dictan en Informática.
Opiniones aparte, lo cierto es que desde 1999 a la fecha se ha dado un proceso de corrimiento desde algunas carreras hacia otras. Dichos datos -además- se pueden analizar con márgenes mínimos de error, si se tiene en cuenta que el total de inscriptos en la UNLP se ha mantenido en niveles similares -entre 22 y 23 mil alumnos- desde hace 10 años, excepto un pico registrado en 2003 y 2004, años en que se superó la barrera de los 25 mil.
SUBE Y BAJA
Comparando los inscriptos en 1999 y en 2009 (para el curso 2010), Derecho perdió un 30,2 % de aspirantes: pasó de 3.400 a 2.370.
Económicas registró 2.676 inscriptos en el '99 y 2.186 en 2008, es decir, 490 alumnos menos. Los datos de este año no pueden tomarse como referencia, pues aún no se cuenta con el cómputo de los centros regionales. En ese mismo período Odontología descendió un 48%, y aunque para el 2010 volvió a crecer (731 anotados), quedó lejos de la barrera de los mil que superó hace una década.
En idéntico lapso de tiempo, la facultad de Bellas Artes, donde se dictan distintas carreras, incrementó su matrícula en un 37,1%; Trabajo Social, un 39,3%, y el Observatorio podría tener este año una inscripción "histórica", merced a un aumento de sus anotados del orden del 37 ó 38%.
Cuando Exactas "perdió" la carrera de Informática -al convertirse ésta en facultad-, pasó de 1.536 anotados en 1999 a 611 en el 2000. Pero desde ese momento experimentó un crecimiento sistemático hasta superar los 1.000 alumnos en el 2008.
Algo similar ocurrió con Humanidades. Hasta 2006 tuvo 4.656 aspirantes, pero al año siguiente -cuando Psicología debutó como facultad- bajó a poco más de 2.450. De ahí en más pegó un gran salto cuantitativo, y este año tuvo una inscripción de casi 3.000 alumnos.
NUEVAS Y CORTAS
La creación de la facultad de Psicología confirmó un fenómeno que se venía observando desde que la disciplina se dictaba en Humanidades: se ha convertido en una de las unidades académicas más masivas de la UNLP, con una inscripción que en los últimos tres años superó los 1.500 alumnos.
Similar -aunque con matices- es el caso de Informática. Si bien viene registrando una matrícula inicial cercana a los mil estudiantes, sus carreras tienen más demanda laboral que el número de anotados.
Por otro lado, las diez carreras que dicta la UNLP con una currícula que se extiende entre 3 y 3 años y medio cuentan con un alumnado aproximado de 4.500 alumnos, y cada año se agregan unos 1.500 más, según datos de la casa de altos estudios.
Finalmente, cabe destacar que al menos cuatro facultades mantienen niveles similares de aspirantes en los últimos diez años. Son los casos de Arquitectura e Ingeniería (entre 1.000 y 1.200), Medicina (un promedio de 1.500) y Periodismo (entre 1.100 y 1.300).
Fuente: ElDia.com
Esperemos que se inscriba la gente justa, para que haya un buen mercado laboral para todos.
Lamentablemente, uno a los 18 años no está muy bien preparado para elegir una carrera universitaria, y cae en las tres básicas.
Saludos!